martes, 31 de enero de 2017

'Cuerpo a tierra', otra cachondada genial de J.P. Manchette

    J.P. Manchette ese genio. En 'Cuerpo a tierra' regresa con otra cachondada. Pese a su lacerante y surrealista humor, a partes iguales -o más bien estrambótico- mantiene la brutalidad de la historia, repleta de crímenes a cuál más salvaje.

    El protagonista, Martin Terrier, alias Christian, es un asesino a sueldo que intenta dejarlo y no se lo permiten. A partir de ahí, las muertes más sangrientas y las aventuras más disparatadas se sucederán.

    El libro es una delicia, un desfase y una incesante sucesión de escenas llenas de interés, risas, salvajismo y personajes desquiciados.

    Nunca ocurre lo que esperamos que suceda, y lo que pasa es como el bofetón de un mal amigo. Se trata de un mundo inseguro y cambiante, dominado por seres sin sentimiento que no cesan de beber coñac del bueno. Sexo y muerte se dan la mano en numerosos momentos. La genialidad de Manchette no tiene límites.

    El cierre es de traca. Una sucesión de irrealidades y momentos tragicómicos. El momento perfecto para disfrutar de una novela negra diferente. Algo así como Carlos Salem y Eduardo Mendoza pasados de revoluciones.

sábado, 28 de enero de 2017

'El cazador de la oscuridad', de Donato Carrisi: excelente

        
    Pequeña joya de la novela criminal. Absorbente desde el principio. Sorprendente durante todo su desarrollo. Inquietante hasta el final. Muy buena. Más que eso. 'El cazador de la oscuridad', de Donato Carrisi, es excelente.

    Geniales los investigadores Marcus (una especie de 007 del Vaticano, aunque sin armas ni vesania) y Sandra (la fotógrafa forense metida a inspectora en la sombra). Una pareja que se complementa a la perfección.

    La trama y las subtramas atrapan al lector desde el principio. Lo que más se agradece es la narración directa y sin florituras. Ni descripciones pesadas ni innecesario barroquismo.

    El asesino en serie es de los más logrados en este tremendo mundo de la novela negra. Las fuerzas de la oscuridad combaten a muerte a las de la luz. Lo sobrenatural también aporta lo suyo en esta pedazo de obra.
    
    Inquietante y más que recomendada. Para disfrutar desde el principio al final. Los giros son inesperados. Los héroes no lo son en su totalidad. 

    ¿Es necesario el mal para que el bien obtenga victorias pírricas?

lunes, 16 de enero de 2017

La mejor novela negra y policíaca 2016-2017

    -'Falcó', de Arturo Pérez-Reverte. El genial escritor de Cartagena se atreve con la novela negra en la España más cainita.

    Tras las obras maestras que son la saga del capitán Alatriste y libros como 'El asedio', 'El maestro de esgrima' o 'Un día de cólera' llega la historia de un mortífero agente del Servicio Nacional de Información y Operaciones (SNIO), Lorenzo Falcó, al que el Almirante encarga las más complicadas misiones en noviembre de 1936. 

    La maestría de Pérez-Reverte da forma a una trama ágil, cargada de fuerza e intensidad. Se lee de cabo a rabo en unos días para dejarnos sin aliento. Los personajes tienen el sello único, y de calidad, de este perfecto contador de historias.


    -'Un hermoso lugar para morir', de Malla Nunn. Este es un libro imprescindible para los amantes de la novela negra más oscura, dura y crítica. Sucede en la Sudáfrica del reciente apartheid en 1952. 
   
    Un oficial 'inglés' debe investigar en el corazón de la tierra 'afrikaner' (racistas y orgullosos descendientes de holandeses) el asesinato de un comisario blanco. 

    Ambiente cargado y tensión al límite en una historia excelentemente escrita. El oficial Emmanuel Cooper, hijo de inglés y mujer afrikaner, se las verá con los servicios secretos y una sociedad cerrada, clasista y llena de odio. 5 estrellas.


    -'Cuchillo de palo', de César Pérez Gellida. Pérez Gellida tal vez sea uno de los mejores autores de novela negra de la actualidad. 

    Sin con la trilogía 'Versos, canciones y trocitos de carne' dio forma a tres obras maestra del género, con su segunda trilogía 'Refranes, canciones y rastros de carne' se supera a sí mismo. 

    Después de la taquicárdica y misteriosa primera novela de esta segunda saga 'Sarna con gusto', con la segunda 'Cuchillo de palo' da una vuelta de tuerca a la historia épica protagonizada por el atormentado y cascarrabias policía nacional de Valladolid Ramiro Sancho.


    -'El jardín de cartón', de Santiago Álvarez. En esta obra hay de todo, desde unos personajes desquiciados y como salidos de una película de Bogart, hasta ladrilleros poderosos y corruptos que campan a sus anchas por Valencia, pasando por un detective privado, Mejías, que es como un Don Quijote apaleado. 

    Mucha acción, humor y sarcasmo en esta aventura que transcurre en plenas fallas. El cine negro tiene su peso en una obra que recuerda a los mejores libros de Eduardo Mendoza y Carlos Salem

    Nada de lo que ocurre es lo que parece en este relato de perdedores y mascletás.


   -'El peso del alma', de José María Espinar Mesa-Moleses una obra maestra. Reúne lo más clásico de la novela negra con toques de Juan Madrid, Andreu Martín, e, incluso, Eduardo Mendoza. Es soberbia. No en vano fue galardonada con uno de los galardones más prestigiosos del país: XX Premio Getafe Negro 2016.

    "El ser humano rechaza a sus congéneres y desconfía de manera radical de sus semejantes. Por abrumadora mayoría evolutiva solo piensa en sí como individuo. La solidaridad y la tolerancia tienen cimientos de escarcha.  Somos un castillo de fósforos". 

    Es novela negra, pero también es poesía y filosofía en estado puro. Magnífica historia de un escéptico excomisario metido a detective privado, gañán, extravagante, descreído y castigador, a la vez que sentimental, duro, leal y justiciero. Un crápula simpático.

miércoles, 4 de enero de 2017

'El jardín de cartón', de Santiago Álvarez: una gozada

        
    Divertidísima, diferente, con escenas dotadas de la acción más desenfrenada y el humor más surrealista, una obra que se disfruta y goza al mismo tiempo, con una subhistoria entre triste, romántica y trágica.

    "Reconozco que simpatizo con usted -dijo en cuanto pudo-: con todo lo que posee, se dedica a buscar un whisky bicentenario. Si yo poseyera la décima parte de su dinero construiría una máquina para devolver a Bogart a la vida".

    Solo un pero: algunas situaciones en las que me pierdo -no sé quién habla y quién escucha- y algunos momentos en los que lo que se describe apenas interesa. Como si hubiera más paja de la necesaria.


    Bebedor, perdedor, cáustico y caótico Mejías

    "El detective se incorporó en su cama con la frente empapada en sudor. Inmediatamente se arrepintió de haberlo hecho. La cabeza dolía como golpes en un gimnasio de supervillanos. Aún estaba vestido, y sus ropas apestaban a alcohol. Escuchó un maullido ronco sobre su regazo. La gatita se giraba frotando su lomo en el cuerpo de Mejías.

    -Zero, voy a darte un consejo. Jamás compitas con alguien que sea mejor bebedor que tú."

    El protagonista, Vicente Mejías, el negativo de Bogart en 'El halcón maltés', es excelente, un perdedor repleto de rencor, mala leche y borracheras con un punto de ridículo y torpeza. Genial.

    Su ayudante es el Sancho Panza ideal, una mosquita muerta, con aspecto de marimacho, criada en las huertas del interior, con más carácter del que se le presupone. Es la encantadora y magnética Berta, estudiante de periodismo y mujer para todo en el destartalado despacho del inspector Mejías.

    "La tía María le había dicho en muchas ocasiones que debía esforzarse en el camino de la rectitud y la honestidad, no porque se tratara del comportamiento correcto, sino porque la pequeña Berta era un desastre para fingir o para engañar a un tercero. 'Nunca hará carrera como ladrona de panderetas', solía decirle, y tenía razón".

    Los personajes secundarios gozan de un protagonismo más que perfecto. El gitano Manuel y su hijo, Pablito, son el no va más, claves en la escena de desenlace del libro, una de las mejores que he leído en mucho tiempo.

    "Pronto se extendió la fama de un whisky extraordinario y aquellas botella inundaron Perthshire, de aldea en aldea. Hay quien dice que el caldo de Auchnagie de aquellos años confería extrañas cualidades a quien lo bebía: el don de la clarividencia, la fuerza de tres hombres, el orgullo de una reza.

    -La típica borrachera, vamos -interrumpió el detective." 

    Jordi, el periodista trepa, que engatusa a Berta, también me ha conquistado, como la dentista-heroína Eva y su novio, el antirico Adán. La familia de falleros es espectacular.

    Esta novela es una gozada total por la mezcla de misterio, crítica social, reminiscencias de los clásicos de la novela y cine negro (Bogart, Bacall, Edward G. Robinson, James Cagney...), por la doble investigación (la búsqueda de un whisky valenciano legendario del 1800 y quién sabotea la falla del magnate Lloret) y por decenas de detalles magníficos.

    "Los grandes héroes de antaño no necesitaban ser altos ni apolíneos: James Cagney, Edward G. Robinson, Kirk Douglas y el mismísimo Bogie eran paladines discretos, con su fuerza grabada a fuego en el pecho".

    Creo que es una voz más que propia, dotada de una riqueza brutal, con ecos de Carlos Salem y Eduardo Mendoza

    Ahora, a por el primer libro de la saga 'La ciudad de la memoria'. Excelso Santiago Álvarez.

lunes, 2 de enero de 2017

'La señora de la mafia', de Juan Martorell: pierde gas

    'La señora de la mafia', de Juan Martorell, es un libro que empieza con fuerza, pero poco a poco se va desinflando, como un globo de aire vacuo.

    Hay diálogos, sobre todo, entre la protagonista y el jefe de la mafia que son infantiles y poco creíbles.

    Pese a ello, la primera mitad de la obra es interesante. Queremos saber en qué quedará la venganza de la primera jefa mafiosa de una familia de Nueva York.

    Lo peor: los tópicos en la vida de esta especie de 'Cenicienta' del siglo XX.

    Lo mejor: es una novela para pasar el rato, entretenida, pero no es una obra 100% de novela negra.